domingo, 31 de mayo de 2009

¡Vacaciones en Londres! (1)

Día 1: Terrassa, Reus, Luton, Londres....

Me gusta viajar en avión.... Cuando llega al principio de la pista y se para... y de repente ¡comienza a correr impresionantemente rápido! y todo ruge y vibra a tu alrededor y notas ese tirón en el estómago y... ¡ya estás en el aire! Siempre me entran ganas de llorar de la emoción. Ves como el paisaje se va haciendo cada vez más pequeñito y pasas a través de las nubes.... y ya sólo está el sol y el inmenso cielo azul.

Le pedí a Xavi que me acercara al aeropuerto de Reus, más que nada para no dejar mi coche allí tirado por diez días. También será bueno para él, porque así podrá usarlo si lo necesita... Este ha sido un capricho que me ha encarecido un poco el viaje: salir de Reus y llegar a Luton a la ida; y salir de Luton y volver a Reus a la vuelta, con horarios de mediodia en vez de madrugada, pero valia la pena.

Estaba un poco nerviosa pero todo fue genial, ningún problema con Ryanair, ni en el aeropuerto, a pesar de ser muy pequeño, o gracias a ello... El viaje bien, y aunque siempre acabo rodeada de niños pesados que no paran de moverse y molestar, me resultó realmente impresionante sobrevolar el Canal de la Mancha...

Al entregar mi DNI y pasaporte en la aduana del Aeropuerto de Luton, entrando ya en Inglaterra, el policia me mira y me pregunta:

- Where are you from? (¿de dónde eres?)

- From Spain -contesto extrañada, ¿no está mirando mi pasaporte?....

- Where? Malaga?

¿¿Malaga?? ¿Y esooo? Le digo Barcelona con un hilo de voz, rezando para que no sea un futbolero aficionado del Manchester, no vaya a ser que me de un ramalazo patriotico y me ponga a cantar el "Weee are the Champiooooonnnsss!!!!" y tengamos un altercado internacional jajaja pero todo es correcto y me deja pasar con una miradita de reojo...

Llegar del aeropuerto de Luton a Londres no fue nada dificil, sólo tuve que coger un bus lanzadera hasta la estación de tren y, una vez allí, recorrí el pasillo entre los andenes unas cinco veces, arriba y abajo con la maleta, sin saber a cual bajar, y me acabé decidiendo por un tren a Brighton, que pasaba por el centro de Londres, luego pasé todo el trayecto sufriendo porque quería bajar en Elephant & Castle y subir andando hasta mi hotel, a diez minutos de allí, en vez de bajar en Sant Pancras, coger el metro hasta Leicester Square, cambiar de linea hasta Waterloo y luego andar, como me había indicado que debía hacer la chica de la taquilla en Luton, pues yo no sabía si el ticket que había comprado me cubría las dos estaciones extra y si lo necesitaria para salir, pero tampoco tuve ningún problema. Elephant & Castle es una estación abierta en un centro comercial y nadie controla tickets, ni siquiera hay máquinas de salida.

El paseo desde la estación de tren hasta el hotel fue muy agradable y sencillo. Todo recto por St. George's Rd, luego a la derecha por Lambeth Rd y ya está... La tarde ya comenzaba a oscurecer pero el aire era cálido. Además he ganado tiempo, porque aquí es una hora menos que en España. El dueño de un supermercado paquistaní salió a la puerta de su comercio en la acera de enfrente a la que yo me encontraba y, llamándome, me saludó con la mano. Acabo de llegar y ya triunfo jajaja. Veni, vidi, vinci, que decían los romanos....

La recepcionista del Days Hotel Waterloo, muy simpática ella, hizo el esfuerzo de dirigirse a mi en español al mirar mi DNI, a pesar de que yo le había hablado en inglés, al darme la llave de mi habitación. ¡Que maja!

La habitación es preciosa, en la tercera planta, la 321 (uyyyy, casiiii!!! jajajaa pero el número es bonito), para no fumadores (¡bieeen!), muy grande y con baño propio, la cama es super cómoda y han tenido el detalle de dejarme un calentador de agua eléctrico sobre la mesa por si me apetece tomar un café (soluble) o te al llegar de mis andanzas, con sobrecitos de ambos, tazas, azúcar y sacarina y dosis de leche.

Hace mucho más calor de lo que esperaba. Frente al hotel hay un típico pub inglés, The three stags (los tres ciervos), y desde la habitación puedo oir las risas de la gente que se están tomando sus pintas y cenas en las mesitas de la calle.

Deshago mi equipaje, ordeno mis cosas, me preparo para mañana comenzar a investigar la ciudad que tantas veces había soñado recorrer, mando algunos mensajes para decir que ya he llegado.... Veo algo de tele, que me deja sorprendida por su calidad y a dormir pronto...

Estoy contenta. ¡¡Estoy en Londres!! ¡¡Por fiiiin!!

martes, 19 de mayo de 2009

La pija

En mi tienda tenemos fruta y verdura a granel. Es decir, tú escoges la cantidad y el género que más te gusta, lo pones en una bolsita y lo pesas en una balanza en cuyas teclas aparecen dibujados los productos, con su nombre en catalán debajo.

Una mujer mayor, ridiculamente ataviada y pintarrajeada como una adolescente, se me acercó, bolsita llena de pepinos en mano.

- Esto lo pesas tú aquí, ¿verdad? -me dice, señalando mi caja.
- No, no, lo tienes que pesar en esa báscula -le contesto amablemente, indicándole el sitio.
- Nooo... -me dice, toda sonriente, moviendo la melena rubia teñida, como si hablara con una tonta a la que hay que explicárselo todo- allí no está, ya lo he mirado...
- Claro que está -voy pensando para mis adentros: a mi me lo vas a decir, so pava, que paso cientos de bolsas de pepinos al día- Tienes que darle a la tecla con el dibujito verde que debajo pone "cogombre" (pepino en catalán)
- ¡Sí, hombre! ¡Y ahora tengo que saber inglés!

Estoooo.... me quedo sin palabras, con la boca abierta. Estoy a punto de partirme de la risa, cuando aparece otra vieja casi igual, mamarracha total superpija... y las dos se ponen a hablar como cotorras, que hace mucho que no se ven y tal y tal...

Paso la compra de la primera, que ni lo guarda en bolsas ni nada, sólo esta por su amiga, no me hace ni caso ni cuando le doy el total, le paso el ticket del parking y le cobro. Ni se ha enterado.

Entre las dos recogen, sin parar de parlotear y le paso la compra a la segunda. Al pasarle el ticket del parking, le recuerdo que sólo disponen de 20 minutos para retirar el coche de nuestro garaje y ella, riéndose, me da una palmada en el hombro y suelta:

-¡Que "grasiosa" es esta niña!

Vale, "grasiosísima"... pero a la media hora alguien llama al timbre del parking, diciendo que la barrera no se le levanta y la compañera que atiende el interfono me avisa de que suben a hacerse un ticket de parking nuevo. Yo me estoy empezando a descojonar, diciéndole que seguro que adivino quién es, cuando aparecen las dos viejunas, hechas un basilisco, gritando que porqué tienen que pagar, que yo les he dicho media hora, y veinte mil excusas más.... pero acaban pagando para salir, como toca.
Me revienta esta gentuza que se piensa que les tienes que tratar como si fueran superiores a ti, que para ellos eres alguien que no cuenta, que eres tonta, sólo por ser cajera en un super. Vete a la mierda, superpija, yo tengo más cultura y más educación que tú... El dinero no te puede comprar la clase.

martes, 12 de mayo de 2009

Ángeles


De un tiempo hacia acá, he notado que muchísimas mujeres llevan al cuello los conocidos como "Llamadores de Ángeles", imagino que pensando que son una bonita baratija o creyendose protegida por unos seres benévolos y gordezuelos con alitas... A mi me dan repelús.

Sé que prácticamente nadie se ha leido la Biblia, incluida yo, pero el haber ido a una escuela de monjas donde la religión era asignatura obligatoria (y ponian nota!) me da una cierta ventaja. Eso y mis reuniones con Loli, una chica Testigo de Jehová que me ha explicado muchísimas curiosidades, pues ella sí se dedica a estudiar El Libro...

Así que sé que los ángeles no son buenos. En el Antiguo Testamento, cada vez que aparecen es para imponer castigos, cumpliendo ordenes de un Dios terrible, o hacer anuncios de Su parte... Son sus soldados, creados para servirle, sin opción para dudar, sin poder elegir su destino. Eso fue lo que hizo que Lucifer se rebelara, pues no entendía todos los privilegios que nos habían sido otorgados, siendo seres inferiores imperfectos, sin fe...

Serán los ángeles los que rompan los Sellos y comiencen el Apocalipsis... así que no los llameis. No los queremos por aquí todavía....

domingo, 10 de mayo de 2009

Los héroes visten de negro

(Continene "spoilers"... Si piensas ir a ver "Star Trek 2009" y no te gusta que te chiven cosas, no lo leas hasta haberla visto...)

Encontrar una sala de cine que te guste es complicado. Yo tengo suerte: las 24 salas del complejo de cines del Parc Vallés son geniales. Son muy escalonadas, con lo que no te tapa ninguna cabeza delante, y hay una fila, justo detras de los asientos VIP (unos mas amplios y separados, por los que pagas sólo un euro más en la entrada) que tiene un ancho extra de pasillo, así que no has de encogerte cuando pasa alguien y luego puedes ver la película con las piernas estiradas. Ahí es donde suelo reservar yo mi entrada, bien centrada respecto a la pantalla. Muchas de las sesiones son numeradas y comprando la entrada por Internet puedes escoger el asiento que quieres. Al llegar allí tampoco has de hacer cola para recoger tu entrada: hay unas máquinas de ServiCaixa por donde pasas tu tarjeta de crédito y te las imprime.

Hoy he ido a ver "Star Trek 2009" y me ha encantado. La opción de argumento es muy válida, la siempre apañada "realidades alternativas": cambias algo en el pasado y el futuro será diferente... Me ha gustado mucho que hayan mantenido una cierta similitud física con los actores clásicos.
















Uhura, Chejov, Sulu, Scottie, el doctor McCoy, Kirk y el siempre sorprendente Spock. De echo, hay dos Spocks. Me ha encantado la elección de Zachary Quinto para este papel, me parece muy buen actor, estaba genial como Sylar en "Heroes", un malo con carisma.... y es una pena que siempre salga tan serio, porque tiene una linda sonrisa...











Y, cómo no, no podía faltar Leonard Nimoy en la película. Una apañada "vuelta de tuerca" a la historia y ¡ta-chaaan! El Spock original...
Una cosa que me llamó la atención es que James Kirk viste de negro toda la película, en vez del conocido amarillo, básicamente porque en la película todavía no es un oficial... ¿O será porque los héroes siempre visten del negro?
Por cierto, que yo acabé acordándome de otro. A media película, comencé a sentir unas cosquillas en la zona del culo, lado derecho. ¿Imaginaciones mías? ¿Un bicho? Pues sí, vaya si era un bicho... ¡el bicho gordo y feo que estaba sentado a mi lado! Disimuladamente, pasé mi brazo izquierdo por detras de mi espalda y esperé a que volviera a acercar sus sucios dedos a mi trasero, uñas preparadas para atacar... A la que volví a notar el cosquilleo... ¡zas, zas! Vamos, ni Lobezno... El resto de la película se la pasó con la manita agarrada en su regazo, bien separado de mi jajaja...